Para el manitas y ex timador Arkin, un hogar tranquilo y una familia de vacaciones es una “oportunidad”. En el interior de una casa hay una caja fuerte con joyas y dentro de la caja hay una rara gema, su única esperanza para pagar la deuda de su ex esposa y mantener intacto lo que queda de su familia. Pero desgraciadamente para Arkin, dentro de esa casa hay un psicópata, un experto torturador que se está ensañando con la familia residente. Mientras avanzan los segundos hacia la medianoche, Arkin se convierte en un héroe reacio atrapado por un enmascarado “coleccionista” en un laberinto letal. He aquí uno de esos villanos sin una idea buena y empeñados en no dar ni un segundo de relax.
Si eres de los que todavía no has visto The Collector, ya estás tardando. Y es que, allá por el año 2009, el cine de terror daba la bienvenida a una de esas películas disfrutables hasta lo inimaginable, sin que la mayoría de fans del género se diese cuenta. De hecho, muy pocas películas son capaces de llevar al espectador a un estado de tensión tal.
En unos tiempos en los que el cine de terror goza de una salud envidiable, The Collector se presentaba sin hacer demasiado ruido, sobrepasada por proyectos considerados como “mayores”, pero a los que nada tenía que envidiar. Algo que todos podéis enmendar desde ya mismo.