Menudo lío se ha formado con Insatiable. Y eso que todavía no le ha dado tiempo ni a estrenarse ante el gran público. La esperada ficción de la cadena ha provocado las iras de centenares de miles de espectadores por lo que se ha considerado por muchos como un argumento inaceptable.
Una adolescente que ha sufrido acoso encuentra en los concursos de belleza un modo de vengarse, con la ayuda de un desacreditado pero muy entregado coach. Así se presenta una serie que ha sido acusada de lo que viene a llamarse “body shaming” o, lo que es lo mismo, de vender un prototipo de de belleza en el que hay un único tipo de cuerpo aceptable o hermoso. De hecho, en la plataforma Change-org son decenas de miles las firmas que ya se han recogido en contra de la serie.
Así las cosas, en Netflix han salido al paso, defendiendo la serie como un proyecto en el que se lanza el mensaje de que lo realmente importante de todo es sentirse cómodo con uno mismo. Esto no ha servido para aplacar los ánimos del público, pero tiene toda la pinta de que la intención de lograrlo tampoco era mucha. Y es que Netflix se ha encontrado con una brutal promoción inesperada para Insatiable, hasta el punto de que ya se frotan las manos con lo que podría ser su nuevo fenómeno. El próximo 10 de agosto lo descubriremos.