Es uno de esos tipos que nunca fallan. Cada vez que Ryan Gosling se embarca en un proyecto, la garantía es de que nos encontraremos ante un protagonista de excepción. Dos veces candidato al Oscar (La La Land y Half Nelson) y hasta cinco veces aspirante al Globo de Oro (se hizo con el de La La Land), parece que los Premios de la Academia tendrán que rendirse a sus pies en algún momento, lo que podría pasar en la próxima edición.
Es estilo, es carisma, es simpatía y es talento. Ryan Gosling se lo ha ganado a pulso y First Man se antoja como la oportunidad idea. El actor vuelve a ponerse a las órdenes de Damien Chazelle tras el fenómeno de La La Land con una película que nos acercará al primer viaje del hombre a la luna. Efectivamente, se trata de un biopic sobre Neil Amstrong, ambientado entre los años 1961 y 1969, periodo de preparación de la más famosa aventura espacial.
Efectivamente, Ryan Gosling se mete en la piel de uno de los grandes héroes americanos y lo hace con acierto. De sobra es sabido que en la Academia tienen especial predilección por este tipo de papeles, de ahí que su nombre ya se haya colado el primero en todas las quinielas para hacerse con el Oscar al Mejor Actor en la próxima gala de los Oscar. Veremos si la cosa llega a buen puerto.