No esperábamos semejante horror. Pese a que puede parecer increíble, Sylvester Stallone está viviendo los días más dulces de su carrera. Así, el tipo que parecía empezar a desaparecer a finales de los 90 nos ha demostrado que a base de inteligencia y talento se puede lograr todo.
Mientras le vemos luciendo lo mejor de su repertorio interpretativo como el viejo Rocky Balboa de Creed (y secuelas), el actor ya prepara la última entrega de la saga Rambo. y la cuarta entrega de Los Mercenarios. A lo que no le prestamos demasiada atención fue a que, entre medias, el bueno de Sly se lanzaba con una secuela de Plan de Escape en la que cambiaba a Schwarzenegger por Dave Bautista. Un filme que en Estados Unidos iba directa a DVD y plataformas caseras. ¿La razón? Que es realmente horrible.
Ray Breslin (Sylvester Stallone) lidera a un equipo de especialistas en seguridad entrenados para sacar a presos de las cárceles más impenetrables. Cuando uno de sus miembros es secuestrado y encerrado en una de las cárceles más sofisticadas del mundo, Ray tendrá que dar con él con la ayuda de algunos de sus amigos. Este es el argumento con el que Sylvester Stallone ha conseguido un 90% de críticas negativas en Rotten Tomatoes. Desastre absoluto.