Nunca deja de sorprendernos el poder de seducción de los muertos vivientes. Los zombis nos encantan y eso lo saben muy bien en Netflix. La plataforma de streaming no ha podido resistirse a ofrecerle pienso del bueno a todos los fans del género, como queda más que claro tras el estreno de Kingdom.
Estamos en el periodo de la Dinastía Joseon (s. XIV hasta s. XIX). En una época convulsa, una especie de brote empieza a provocar que los humanos se conviertan en zombis. Así se presenta Kingdom, una serie coreana dirigida por Kim Seong-hun y en la que Netflix tenía fundadas esperanzas.
Kingdom aterrizaba el pasado 25 de enero en la plataforma de streaming, superando incluso las mejores expectativas. Y es que la serie es una puñetera maravilla. Todo está cuidado con mimo y desarrollado con nervio. La tensión, la puesta en escena, los personajes o la ambientación convierten a Kingdom en una de las primeras gratas sorpresas del año y lugar de peregrinación obligado para todos los fans del género.