Esta gente no se anda con miramientos. En Disney se han gastado un pastizal con la compra de Fox y quieren controlarlo todo cuanto antes. Casi 70.000 millones de dólares no es tontería, por lo que no les va a temblar el pulso a la hora de buscar la máxima rentabilidad. Las consecuencias no han tardado en hacerse notar con despidos o cierres de divisiones. Sin embargo, en lo que a nosotros se refiere, llega el momento de empezar a ver como muchos proyectos se caen.
Alita: Ángel de combate se ha convertido en una de las cuestiones mas peliagudas. Cierto es que la cinta ha terminado resultando rentable gracias a sus mas de 400 millones de dólares recaudados, pero tampoco es ninguna locura. Así, Fox corría a dar luz verde a una secuela que, según parece, Disney querría cargarse.
La compañía del ratón solo quiere lanzarse con proyectos seguros y Alita: Ángel de combate no parece ajustarse a esa política. ¿Problema? Pues que James Cameron es el productor de la película y está empeñado en hacer el proyecto realidad. Con Cameron no se juega. Además, es el responsable de Avatar y la saga ha entrado a formar parte de Disney. No parece buena idea entrar en guerra con un tipo que puede dejar una lluvia de millones en las arcas de la factoría.
Disney…oh no….,ya se cagaron en todo…!