No conviene satanizar eso del remake. Cierto es que en Hollywood están abusando bastante de recuperar ciertas historias, pero también conviene decir que cada generación merece una adaptación propia y adaptada a los tiempos de algunas de esas historias. Cementerio de animales era una de las que llevaba tiempo pidiéndolo a gritos.
A finales de los 80, una de las grandes obras de Stephen King se presentaba con una versión algo decepcionante. Justo tres décadas después, tenía toda la pinta de que el asunto se iba a enmendar. Nada más lejos de la realidad, ya que lo que nos hemos encontrado es una película que poco de nuevo aporta. Esperábamos una It, pero nos hemos chocado de lleno con la irrelevancia. Porque no es que Cementerio de animales sea mala. Simplemente, no aporta.
Durante gran parte de la cinta asistimos a una apuesta carente por completo de nervio y originalidad. De hecho, el tiempo dedicado a trazar las relaciones entre los personajes se ejecuta de forma inadecuada. Escasa es la química entre todos los protagonistas. Así empezamos a deambular por algunas escenas que buscan recuperar la esencia del terror ochentero, pero que nos dejan más fríos que otra cosa.
Cementerio de animales tiene ese problema de algunas cintas de terror que terminan arrancando carcajadas en algún que otro momento y sin pretenderlo. Así, la película se convierte en una decepción, sobre todo teniendo en cuenta lo que podría haber sido.
Que exactamente pretenden que “aporte” una pelicula basada en una novela? “Originalidad”? Es una nueva adaptacion, no una remake.
Seria bueno que dejen de hundir peliculas que aun no se estrenan solo porque no tienen nada mejor de que hablar.