Si pensaban tirar de la buena fe de los fans, pueden estar seguros de que han conseguido cabrearlos. Marvel pretendía conseguir los poco más de 40 millones de dólares que todavía separaban su taquilla del récord de Avatar con el lanzamiento de lo que se suponía que iba a ser una versión extendida de Vengadores: Endgame. Algo que ha terminado siendo más cercano a una tomadura de pelo que a otra cosa.
Menos de 7 minutos de contenido adicional, siendo este una escena de Hulk bastante pobre, un homenaje a Stan Lee y materiales de Spider-Man: Homecoming. Así, los seguidores de Marvel que acudían a la llamada de sus superhéroes favoritos, con lo que se encontraban era con que volvían a pagar la entrada a cambio de nada.
Marvel nos ha cabreado un poco. Por esta vez lo pasaremos por alto, pero esto de engañarnos no debería volver a repetirse.