Los Parker son una familia aparentemente estable. El patriarca, decidido a mantener intactas las tradiciones familiares, gobierna con mano de hierro. Como si de la tempestad de lluvia torrencial que acecha la zona se tratase, la tragedia golpea a los Parker cuando las hijas, Iris y Rose, se ven obligados a asumir responsabilidades que van más allá de las de una familia típica.
Impactante a más no poder. Somos lo que somos es una de esas películas que no se olvidan fácilmente. Lanzada en el año 2013 como adaptación americana de la película mejicana Somos lo que hay, la película lograba darle una vuelta de tuerca al asunto, creando una identidad propio que dejaba atrás las bondades del filme original. El miedo de la película era de esos que calaban, lo que queda de manifiesto cuando el recuerdo es tan vívido después de varios años.
Algo tiene capaz de engancharse en el cuerpo. Algo siniestro nos apresa en una película que tiene sobresaltos, pero cuya gran virtud es la creación de un clima inquietante hasta niveles más allá de lo aconsejables para la salud. Una maravilla de esas que no se deben pasar por alto.