Sin lugar a dudas es de lo mejor que ha caído en la televisión en este 2019, pero no ha hecho es suficiente ruido. Todos los usuarios de HBO saben de sobra que la compañía suele acertar en sus apuestas. Su sello es sinónimo de calidad, como queda de manifiesto en apuestas del calibre de Watchmen, Juego de Tronos o Westworld. Eso sí, existe un patio trasero en la HBO plagado de series gloriosas que no alcanzan la relevancia merecida y Our Boys es uno de los ejemplos más representativos.
Todo comienza cuando, en Jerusalén, tres jóvenes judíos, estudiantes ultraortodoxos, son secuestrados en las afueras de la ciudad por Hamas. Durante los 18 días que dura el secuestro, toda la sociedad israelí se moviliza pidiendo su liberación, obteniendo el caso una cobertura mediática total en el país.
Acercarse a todo lo relacionado con el conflicto entre Israel y Palestina es complicado. Sobre todo si se trata de un pasaje tan oscuro y reciente como la escalada de violencia en Gaza de 2014. Y es que Our Boys toma como base unos hechos reales de sobra conocidos para ofrecernos diez episodios sin concesiones al personal. La serie es inclemente a la hora de construir su retrato de unos días de ira y fuego. Eso sí, lo hace componiendo una partitura estética que quita el sentido.
Es una de las series más impactantes del año, pero carece de la trascendencia merecida. Sea como fuere, nuestro deber moral es avisaros de que tenéis una maravilla titulada Our Boys el vuestro catálogo de la HBO.