Esta no la vimos venir. A pesar de que Dos policías rebeldes siempre había tenido su encanto, lo cierto es que no había nada demasiado memorable en ninguna de las dos películas más allá del enorme carisma de sus protagonistas. Poco podíamos imaginar que 25 años después de que entrasen en nuestras vidas de la mano de Michael Bay, la ya trilogía fuese a dar un salto de calidad tan espectacular.
Efectivamente, Bad Boys for life es una pasada. Puede que el diagnóstico resulte simple, pero la realidad es que todas las virtudes de la saga se conservan y se añaden nuevos elementos espectaculares. Como ha ocurrido con la saga Fast & Furious o Misión imposible, lo que nos encontramos es con que alguien ha decidido darle el toque de acción espectacular y mezclarla con el humor de Will Smith y Martin Lawrence.
Efectivamente, Bad Boys for life no va a ganar media docena de Oscars, pero lo que no se le puede negar a la película es que es todo lo que podría ser y un poco más. Esto empieza a ser una joyita y esperemos que la cosa no acabe aquí, porque esos policías llamados Mike Lowery y Marcus Burnett todavía tienen mucho que ofrecernos.