Es de lo mejor que le ha pasado al cine en su historia. Puede que, a día de hoy, Alien, el octavo pasajero parezca un filme menos audaz de lo que realmente es, pero se trata de la película que lo puso todo patas arriba. La cinta de Ridley Scott se convertía en pieza fundamental del séptimo arte por mil detalles. Eso sí, a todos nos viene a la mente la misma escena: El xenomorfo saliendo de la barriga de John Hurt.
Es un hecho que generaciones enteras de cinéfilos quedaron marcadas por el instante en cuestión, pero no eran los únicos. Incluso el mismísimo Stanley Kubrick quedaba asombrado de la habilidad para construir tan poderosa secuencia, hasta el punto de no resistirse a levantar el teléfono y llamar a Ridley Scott para preguntarle al respecto.
“Stanley Kubrik me llamó preguntándome «¿Cómo lo has hecho? Lo he visto a cámara lenta y no puedo ver el corte». Se lo expliqué y me dijo «Vale, lo entiendo, funciona»”. Con estas palabras, el sensacional director confirmaba una anécdota espectacular. Y es que si consigues asombrar al mismísimo Stanley Kubrick es que tienes raudales de talento.
Pasarán los años y esta seguirá siendo una de las escenas más terroríficas de la historia del cine!!!
¿Y en qué momento explica cómo lo hizo?
Se lo dijo a Kubrik y el lo entendió. Cosas de ellos.