6. Tiburón 2 (1978): No es la primera entrega y no está Spielberg, pero el entretenimiento es incuestionable. A pesar de que ya han pasado cuatro años desde que un gran tiburón blanco aterrorizara al pequeño pueblo costero de Amity, el jefe de policía Brody sigue preocupado. Sin embargo, el alcalde no duda en poner en marcha varios proyectos para atraer de nuevo al turismo. Dos submarinistas exploran la zona donde había aparecido el peligroso escualo y son devorados. Su desaparición alerta a Brody: es verano y al pueblo están llegando muchos turistas. Mientras tanto, un grupo de chicos, entre los que están los hijos de Brody, van de excursión a una península cercana.
5. Megalodón (2018): Jason Statham y un tiburón de épicas proporciones dándose de hostias. Un submarino de aguas profundas, que forma parte de un programa internacional, es atacado por una enorme criatura y queda averiado en el fondo de la fosa oceánica más profunda del Pacífico, con su tripulación atrapada en el interior. El tiempo se acaba y un oceanógrafo chino, el Dr. Chang, recluta a Jonas Taylor (Jason Statham), un especialista en rescate en aguas profundas, en contra de los deseos de su hija Suyin (Li Bingbing) que cree que puede rescatar a la tripulación por sus propios medios. Pero ambos deberán unir sus fuerzas para salvar a la tripulación y también al océano de una amenaza imparable: un tiburón prehistórico de 23 metros conocido con el nombre de Megalodón
4. Open Water (2003): Una auténtica joya del género que da todavía más cosica al saber que se basa en hechos reales. Una pareja adicta al trabajo había decidido tomarse un tiempo de relax y pasar unos días buceando. La lancha que los lleva, debido a un descuido de la tripulación, los abandona en medio de un mar, a la deriva y lejos de la costa, en unas aguas infestadas de tiburones.