Pocas películas como aquella. Bugs Bunny y su equipo desafían a los Nerdlucks (un grupo de pequeños extraterrestres) a un partido de baloncesto para decidir si los Looney Tunes permanecen en la Tierra o se trasladan a una lejana galaxia para trabajar en un parque de atracciones de Montaña Tontolandia. Los Nerdlucks cuentan con una poderosa arma secreta que los hace superiores: se han apoderado de las mejores cualidades de las estrellas de la NBA (Charles Barkley y Patrick Ewing). Pero también los Looney poseen un arma secreta: ¡Michael Jordan!
Todos recordamos la década de los 80 como un periodo incomparable de cine con encanto. Sin embargo, los 90 no le fueron a la zaga. Esta afirmación se sustenta fácilmente cuando volvemos la vista atrás y nos encontramos con filmes del calibre de Space Jam.
En el año 1996, la unión entre Michael Jordan y los Looney Tunes era el origen de una cinta gloriosa e inolvidable. Un espíritu que volverá con Space Jam: A New Legacy. LeBron James es el gran protagonista de un filme que ha logrado despertar ya enorme expectación entre los fans y que ha empezado ya a dejarse ver con una imagen sensacional. Al loro con el nuevo uniforme del Tune Squad.