Si es que la chica estaba pillada. Cuando tus padres son Ethan Hawke y Uma Thurman ya partes con la ventaja de tener una genética privilegiada. Eso acaba de demostrarnos Maya Hawke, una joven que tiene el mundo en sus manos.
Efectivamente, la joven hija de las dos grandes estrellas parece haber heredado el talento y la pasión de sus padres por la interpretación. Así, después de su sensacional trabajo en la serie Mujercitas, le llegaba una gran oportunidad de darse a conocer ante el gran público con la tercera temporada de Stranger Things. Robin era el nombre de un personaje que rápidamente se metía en el bolsillo a los fans y que disparaba la popularidad de la actriz.
Érase una vez en… Hollywood era la siguiente parada de una Maya Hawke que ahora volverá con la genial Mainstream (Gia Coppola), una película que va despertando infinitos comentarios a su paso. Y es que la agenda de Maya Hawke no hace más que llenarse de proyectos. No la perdáis de vista, porque va a dar mucho que hablar en los próximos años.