Era uno de los personajes más encantadores de la serie, pero en Juego de Tronos ya sabemos que nunca hubo demasiado espacio para la esperanza. Shireen Baratheon siempre estuvo rodeado de cierta tristeza. La hija de Stannis Baratheon y su rostro parcialmente cubierto de psoriagris se plantaban en Juego de Tronos con 11 años para ganarse el corazón de nuestro querido Davos y de gran parte del público, seducido por la pequeña. Eran varios años los que la joven Kerry Ingram se dejaba ver en la pequeña pantalla. Un tiempo a lo largo del cual iba convirtiéndose en una mujer, pero que no habíamos podido apreciar hasta ahora.
Está realmente cambiada De hecho, hoy día resultaría irreconocible para cualquiera. Y es que Kerry Ingram tiene ya 21 años, y luce bien distinta a la pequeña que estábamos acostumbrados a ver en la serie. Atentos, porque así de cambiada está la Shireen Baratheon de Juego de Tronos.