Es un año realmente complicado. De hecho, ya pasa del año este periodo de turbulencias. La limitación en lo que a grandes estrenos se refiere ha mermado la calidad de la cartelera de forma constante y la lista de contendientes al Oscar a la Mejor Película se antoja pobre, pero el caso de Minari estamos ante un filme que dignifica los premios.
David, un niño coreano-americano de 7 años, ve cómo a mediados de los años 80 su vida cambia, de la noche a la mañana, cuando su padre decide mudarse junto a toda su familia a una zona rural de Arkansas para abrir allí una granja, con el propósito de lograr alcanzar el sueño americano.
Una de las grandes cintas independientes del año parece tener un lugar asegurado entre las candidatas al Oscar a la Mejor Película. Y en medio de todo el nombre de Steven Yeun ha logrado disparar su cotización. El actor de The Walking Dead que nos dejó traumatizados tras su primer encuentro con Negan firma una de las mejores interpretaciones del curso, lo que ha provocado que esté ya en todas las quinielas para convertirse en uno de los candidatos al Oscar a Mejor Actor. De hecho, en la carrera por el premio se multiplican las menciones hacia un intérprete que es ya la gran sorpresa en una lista plagada de nombres tan ilustres como los de Anthony Hopkins, Tom Hanks, Chadwick Boseman o Gary Oldman. Grande, Glenn.