Hay veces que en el cine ocurren cosas incomprensibles. Por alguna razón, alguien decide invertir millonadas en proyectos que no pintan ya demasiado bien desde su inicio mismo. Algo que se puso más que de manifiesto con la horrenda Max Steel.
Max McGrath es un adolescente que descubre que puede generar la energía más poderosa del universo, pero que para contenerla y dominarla necesita unirse a Steel, un misterioso ser extraterrestre. Gracias a sus poderes podrá defender al mundo de todos los villanos que lo acechan.
El intento por aprovechar el tirón del cine de superhéroes fracasaba estrepitosamente. Con un coste de producción que no llegaba a trascender, pero que se intuye más que elevado, el filme terminaba su andadura en los cines allá por 2016 con poco más de 6 millones de dólares recaudados. Hay quien habla de pérdidas cercanas a los 80 millones, pero incluso podrían ser más. En cualquier caso, lo realmente lamentable es el resultado creativo de una cinta que contaba con nombres como Andy García o Maria Bello en su reparto. Un desastre en toda regla.