El vudú y el terror se apoderan de un muñeco de aspecto inocente habitado por el alma de un asesino en serie. Cuando Andy Barclay, un niño de seis años de edad, asegura que “Chucky”, su nuevo muñeco, ha arrojado violentamente por la ventana a su niñera, nadie le cree. Pero una larga serie de horribles asesinatos conduce al detective que se ocupa del caso hasta el muñeco y, entonces, descubre que el auténtico terror no ha hecho más que empezar. El malvado muñeco pretende transferir su diabólico espíritu a un ser humano, y el pequeño Andy parece ser el candidato perfecto.
Con este argumento, el director Tom Holland se sacaba de la manga a uno de los personajes más emblemáticos del cine de terror. Corría el año 1988 y Muñeco diabólico empezaba a construir una leyenda que se extendería durante muchas más secuelas y que ahora, treinta años después de su irrupción, dará el salto a la pequeña pantalla.
Don Mancini, responsable de los últimos paseos por los cines de Chucky, será el responsable de los ocho episodios de los que constará la primera temporada de una serie de Muñeco diabólico. Una apuesta para Syfy que promete terror del bueno.
Después de que un muñeco Chucky clásico aparece en una venta de garaje suburbana, una idílica ciudad estadounidense se ve sumida en el caos cuando una serie de horribles asesinatos comienzan a exponer las hipocresías y secretos de la ciudad. Ese será el argumento de Chucky, una serie que se presenta en sociedad con este avance.