Parece que algunos han descubierto el enorme talento de Sacha Baron Cohen con El juicio de los 7 de Chicago, pero ya era un inmenso intérprete antes. Aquella obra maestra televisiva que Netflix estrenaba en 2019 bajo el título de El Espía era buena muestra de ello.
En la década de 1960, el israelí Eli Cohen se convierte en agente secreto del Mossad para espiar a Siria bajo el nombre ficticio de Kamel Amin Thaabet, como parte de una larguísima misión que, a lo largo de los años, le llevó a cuestionarse si su lealtad a la patria era más importante que vivir una segunda vida en peligro constante lejos de su familia.
Seguro que a muchos os está extrañando que un argumento como el de El Espía pueda tener como protagonista a un dios del humor gamberro como Sacha Baron Cohen. ¿Un drama cargado de intriga y tintas de espionaje centrado en el conflicto árabe-israelí? Pues sí. El Espía es una miniserie de esas que cortan el aliento y ahí, en medio de todo, emerge la figura de un Sacha Baron Cohen que se sale.
Son seis los episodios de una serie que tomaba como base la historia real del espía Eli Cohen. Una apuesta de Netflix que se convertía en uno de sus proyectos más lúcidos y acertados de los últimos años. Sorprende que no se convirtiese en todo un fenómeno. Si eres de los que disfrutan las subidas de tensión y los sudores fríos cuando te pones ante el televisor, El Espía es lo que estás buscando. Corta la respiración esta miniserie que no puedes permitir que se te siga escapando.