Ha tenido que llegar Dom Toretto para poner las cosas en su sitio. A pesar de que crítica y público no están entusiasmados con el resultado final, no cierto es que el tirón de la saga Fast & Furious es incuestionable. Con dosis descomunales de acción, la nueva entrega se plantaba en los cines de estados Unidos para dar el pistoletazo de salida a una era en la que los grandes estrenos volverán a marcar el verano. Un aterrizaje más que exitoso.
Tras amasar 330 millones de dólares en China y algunos otros mercados menores, Fast & Furious 9 se enfrentaba a la prueba de fuego de su lanzamiento americano. ¿El resultado? Pues unos sensacionales 70 millones de dólares que la convierten en el mejor estreno desde el inicio de la pandemia de coronavirus. Una noticia sensacional y que deja claro que la vida vuelve a parecerse un poco a la que era.
¿De qué va Fast & Furious 9? Dom Toretto (Vin Diesel) lleva una vida tranquila con Letty y su hijo, el pequeño Brian, pero saben que el peligro siempre acecha. Esta vez, esa amenaza obligará a Dom a enfrentarse a los pecados de su pasado si quiere salvar a quienes más quiere. El equipo se vuelve a reunir para impedir un complot a escala mundial, liderado por uno de los asesinos más peligrosos y mejor conductor a los que se han enfrentado; un hombre que además es el hermano desaparecido de Dom, Jakob (John Cena).