La temporada de premios ha comenzado y la carrera por los Oscar empieza a estar cada vez más clara. Mucha tela hay que cortar todavía hasta el próximo 27 de marzo de 2022, pero la realidad es que algunos nombres ya se han ganado el derecho convertirse en los rivales a batir. Precisamente en la categoría de mejor actor nos encontramos uno de ellos: Will Smith.
A pesar de ser un un actor de enorme talento y a que el público le adora, lo cierto es que los últimos años no ha sido nada fáciles para Will Smith. La carrera del intérprete iba cayendo poco a poco a base de una mala selección de proyectos. El tipo capaz de petarlo con cada película durante 15 años seguidos veía como su efecto se desvanecía.
Sin embargo, ya podemos decir que Will está de vuelta. El trabajo del actor en King Richard ya ha provocado que todas las quinielas para el Oscar le coloquen en el puesto de cabeza. Will Smith ha recuperado su mejor nivel gracias a un papel realmente premiable y en el que vuelve a salirse.
King Richard nos acerca a la figura de Richard Williams, un padre inasequible al desaliento que ayudó a criar a dos de las deportistas más extraordinarias de todos los tiempos, dos atletas que acabarían cambiando para siempre el deporte del tenis. Richard tenía una visión muy clara del futuro de sus hijas y sirviéndose de métodos poco convencionales, elaboró un plan que llevaría a Venus y Serena Williams de las calles de Compton, California, al Olimpo de deporte convirtiéndolas en iconos legendarios. Este es el año de nuestro queridísimo Will.