El revés ha sido terrible. El 2017 siempre será recordado como el momento en el que la industria de Hollywood se puso patas arriba. No es para menos, ya que décadas de silencio llegaban a su fin con una descomunal batería de denuncias ante la frecuente práctica de abusos sexuales por parte de muchas estrellas y algunas de las personalidades más poderosas del sector. Nombres como los de Harvey Winstein o Kevin Spacey veían como sus nombres iban saltando a la palestra, lo que tenía consecuencias inmediatas en sus carreras.
Precisamente el rostro del dos veces ganador del Oscar se convertía en el más visible de la tormenta. El intérprete era despedido de la exitosa serie House of Cards, así como de la cinta Todo el dinero del mundo. Su agenda quedaba completamente vacía de proyectos. En su horizonte, incontables demandas por abuso sexual o acoso. Sin embargo, la cosa no salía mal para el actor ya que, a medida que se juzgaban las causas, iba saliendo indemne. Así hasta el día de hoy.
La friolera de 31 millones de dólares. Esa es la cifra que Kevin Spacey tendrá que pagar a la productora de House of Cards por incumplimiento del contrato que le vinculaba con la serie. Yo es que, a pesar de ser despedido, la razón de ello no era otra que la violación del contrato por violación de la política de la empresa durante el rodaje de la serie. El acoso a más de una decena de miembros del equipo habría sido la razón de todo ello. Serios problemas para un actor caído en desgracia.H