Es adecuado hablar del mayor fenómeno cinematográfico desde Vengadores: Endgame. Lo que ha conseguido a lo largo de las últimas semanas Spider-Man: Sin camino a casa es espectacular. La tercera entrega de la saga monográfica del hombre araña de Tom Holland lo ha petado de forma asombrosa, además de encandilar a crítica y público por igual.
Sin lugar a dudas, gran atractivo de Spider-Man: Sin camino a casa era el regreso varios de los grandes personajes de anteriores universos cinematográficos de Spider-Man, incluyendo a los actores que daban vida a Peter Parker en ellas. Y precisamente uno de los grandes artífices del éxito cinematográfico de Spider-Man era Sam Raimi. El enorme director era el responsable de la trilogía original, en la que Tobey Maguire se metía en la piel del célebre trepamuros. Así, su opinión es más que cualificada.
“Es realmente divertida. Me gusta mucho ‘No Way Home’ y el público con el que veía la película se volvió loco. Resultó increíble ver a Alfred Molina de nuevo en su papel su papel y a Willem Dafoe, llevándolo al siguiente nivel. Y Tobey, increíble como siempre. Lo mejor que puedo decir es que fue refrescante”, declaraba el director en una reciente entrevista concedida a Variety. No hay nadie que escape al encanto de Spider-Man: Sin camino a casa.