Jamás de los jamases podríamos haber imaginado semejante situación. La 94ª edición de los Oscar será eternamente recordada por una agresión inaceptable. Will Smith, uno de los actores más queridos por parte del gran público, se plantaba en la gala como gran favorito para alzarse con el Oscar a Mejor Actor por El método Williams. Iba a ser su gran noche, pero todo se tornaría en la peor de su carrera.
En un momento dado, Chris Rock salía al escenario, tirando de su habitual humor cargado de mala baba. Entonces cuando le dedica unas palabras a la esposa de Will Smith, la también actriz Jada Pinkett. Unas palabras de mal gusto aludiendo a la calvicie de la mujer. El humorista propuso que la intérprete protagonizase la secuela de La teniente O’Neil, cinta en la que Demi Moore luce rapada. Al principio Will Smith parecía tomárselo con humor, pero inesperadamente se subía al escenario y le da una bofetada a Chris Rock ante el estupor de todos los presentes.
Por si no fuese suficiente, a su regreso a la butaca Will Smith empezaba a gritar amenazante a Chris Rock. “¡Mantén el nombre de mi mujer fuera de tu puta boca!”. Una sucesión de comportamientos inaceptables por parte de Will Smith y difíciles de entender. Así, la imagen de una de las mayores estrellas de cine de los últimos años golpeando a un presentador en el escenario de los Oscar puede ser lo más vergonzoso jamás visto en 94 ediciones.