Año 1977. Dos agentes del FBI (Jonathan Groff y Holt McCallany) revolucionan las técnicas de investigación para encontrar las respuestas a cómo atrapar a asesinos en serie y mentes psicópatas.
Con ese argumento se plantaban nuestras vidas esa obra maestra de David Fincher llamada Mindhunter. La serie se convertía en uno de los productos más brillantes de la parrilla de Netflix allá por 2017. Dos años después llegaría una segunda tanda de episodios que, a la vista del panorama, bien podría ser la última de la espectacular ficción televisiva.
Hace meses el propio David Fincher confirmaba que nos esperan nuevos episodios en un futuro próximo. Una noticia preocupante a la que ahora se añade el hecho de que Netflix ha liberado a los protagonistas de Mindhunter de sus contratos. Así, sin tener todavía noticias de una cancelación oficial, lo cierto es que tiene toda la pinta de que la vida de la serie habría llegado a su final. Un golpe en toda regla para millones de seriéfilos.