Pocas veces habíamos asistido a un desacierto de semejante nivel. Estamos muy acostumbrados a asistir a grandes aciertos por parte de Netflix. Series convertidas en fenómenos y capaces de mantenernos pegados a la pantalla. Sin embargo, esta vez la cosa les ha salido realmente mal. Y es que lo de Bienvenidos a Edén no hay forma de salvarlo.
¿Eres feliz? Con esta pregunta Zoa y otros cuatro atractivos jóvenes, muy activos en las redes sociales, son invitados a la fiesta más exclusiva de la historia en una isla secreta, organizada por la marca de una nueva bebida. Lo que comienza siendo un viaje excitante pronto se transformará por completo en el viaje de sus vidas. Pero el paraíso no es realmente lo que parece… Bienvenidos a Edén.
No solo estamos ante el mayor desacierto de Netflix, sino también ante una de las peores series españolas te recordamos. Poco o nada se salva en Bienvenidos a Edén. Ni la trama interesa, ni los personajes llaman la atención. De hecho, todo el tiempo parece que estamos asistiendo a una serie más propia de 15 años atrás, aunque ni en ese momento habría funcionado demasiado bien.
Visto lo visto, no parece que entregarle un puñado de horas a Bienvenidos a Edén sea la mejor inversión posible de tiempo.