Esto de pasar tantas horas en rodando juntos tiene sus efectos. Si encima te pasas parte de ese tiempo magreándote con tu compañera de reparto, lo normal es que acabe pasándote como a los protagonistas de nuestro artículo de hoy. En todos los casos, el amor que podíamos ver en la gran pantalla se transformaba en realidad hasta el punto de que muchos de estos actores son los protagonistas de algunos de los romances más famosos y duraderos de Hollywood.
Kristen Stewart y Robert Pattinson: La relación de amor que cautivo a millones de adolescentes (y no tan adolescentes) en “Crepúsculo” y sus secuelas era llevada a la vida real por sus protagonistas. Cuatro años duró la pareja formada por Edward y Bella. Un tiempo en el que se hartaron se protagonizar portadas de revistas.
Angelina Jolie y Brad Pitt: Cuando Brad Pitt rompía de forma repentina su relación con Jennifer Aniston, todo apuntaba a calentón pasajero. Acababa de conocer a Angelina Jolie en el rodaje de “Sr. y Sra. Smith” y la atracción resultó instantánea. Poco se podía imaginar que más de diez años después seguirían formando una de las parejas más solidas de Hollywood.
Penélope Cruz y Javier Bardem: Nuestros dos actores más internacionales se conocían desde mucho tiempo atrás, pero tuvo que venir Woody Allen con su “Vicky Cristina Barcelona” para que el amor entre ellos surgiese como un torbellino. Más de cinco años de relación y dos hijos en común son el sensacional balance de los oscarizados intérpretes.
Ryan Gosling y Eva Mendes: Son, sin duda, una de las parejas más atractivas de Hollywood. El rodaje de “Cruce de caminos” unía los pasos del talentoso actor y la arrolladora latina. Tardaron en dejarse ver juntos, pero ya son casi cuatro los años que llevan juntos e incluso han tenido a su primera hija.
Rachel Weisz y Daniel Craig: Una auténtica sorpresa. Ambos actores anunciaban su boda incluso antes de que la prensa se enterase de que mantenían una relación sentimental. La cinta de terror, “Detrás de las paredes” sería el lugar en el que los sensacionales intérpretes iniciaban su particular idilio.
