Por el mismo camino que nos llevó hasta “Nebraska” alcanzamos el centro de Europa. Hasta el corazón de Hungría llegamos para conocer a la sexta clasificada de nuestra lista con las 15 mejores películas de 2014.
Posición 6ª:
“El Gran Hotel Budapest”
El estilo se tiene, o no se tiene. Esas cosas no se pueden disimular. Cuando nos sentamos en una butaca de cine o ante nuestra pantalla casera nos encontramos con las propuestas ofrecidas por directores, cuya mano nos resulta reconocible, pero en pocos caso el estilo salta tanto a la vista como en el caso del genial Wes Anderson. El hombre que envió a Bill Murray en busca de un tiburón leopardo a las profundidades marinas o que se marcó una escena “erótica” entre niños lo ha vuelto a hacer: “El Gran Hotel Budapest” es otro ejercicio estilístico absolutamente impagable.
Cada plano, cada color, cada diálogo o cada actuación juegan a la radical propuesta cinematográfica de un director que no sabemos si nos arranca la sonrisa por lo mordaz de sus secuencias o por lo brillante de su mera existencia. Una inmensa fortuna y la lucha entre los candidatos a su herencia son el caldo de cultivo ideal para que Ralph Fiennes, Edward Norton, Willem Dafoe, Adrien Brody, Tony Revolori, Saorise Ronan, Jude Law y un sinfín de enormes actores muestren de lo que son capaces con un perfecto equilibrio entre todos ellos. Con un aire de hermosa y triste nostalgia, Wes Anderson nos abre las puertas del Gran Hotel Budapest en una mezcla de humor y lírica para la que ninguna lengua ha encontrado todavía una palabra que se adecue o le haga honor.